miércoles, octubre 08, 2008

SYLVIA DE VALMORE MUÑOZ ARTEAGA.

(BAUTIZO DE LA OBRA SYLVIA)

En la VI Feria del Libro UNICA, en Maracaibo, tuve la oportunidad de conocer al poeta Valmore Muñoz Arteaga, un escritor simpático y agradable, con quien pude charlar sobre su más reciente obra: SYLVIA bajo el sello editorial Rojo y Negro.

En el texto de presentación de la obra que puedes leer en este enlace: http://monzantg.blogspot.com/ se plantea: “Sylvia fue escrita con el órgano de la sensualidad. La piel del poeta, su lengua, sus manos, hacen un recorrido en cuarenta cantos. Símbolo que guarda –en silenciosa evidencia– un pacto con el desierto, con la animalidad, con la muerte”

La primera pregunta que le hice al escritor tenía que ver con el erotismo que se desborda en su obra: vivencias, límites, sentires…

“El erotismo de mi obra es el erotismo que vivimos constantemente. El asunto es que, de pronto, ha sido un género menospreciado y por otro lado tachado de pornográfico, de indecente, de inmoral, de cualquier cantidad de cosas. Por ahí siempre ha pasado el erotismo.

Sylvia, se desnuda de esa manera porque son mis lecturas en primer lugar. Hay mucho de vivencias porque uno escribe lo que vive. Son muchas cosas, muchísimas cosas.

Yo, a veces pensaba que era estúpido lo que decían algunos escritores – No, yo me senté a escribir y me dejé llevar – Yo pensaba que eso era estúpido, que eso no pasaba, pero sí ocurre.

Cuando yo me senté a escribir no tenía la menor idea que iba a salir Sylvia o algo parecido, sencillamente empecé a sacar cosas que tenía por dentro. Y bueno, dándole forma al libro terminó siendo un texto erótico, aunque yo no lo veo erótico. Primero porque se requiere de una inteligencia suprema que yo no tengo y se necesita de una delicadeza para expresarse que yo no tengo.

Yo diría que Sylvia es un texto magnicida. Que va a / por los principios morales, tontos, que tiene esta sociedad”

Con el vocablo “magnicida” retumbando en mi mente, me adentré en una obra que atrapa con su sensualidad, con la armonía lujuriosa de sus cantos, con ese susurro que se hace gritos y resonancias de un buscarse en sus laberintos profundos: sintiendo y sintiéndose para vivir o morir en esos brazos que ya no le esperan.

Sylvia no sólo es una obra sensual bellamente escrita. Es también la voz de un poeta universal.

SYLVIA

(Fragmentos)

XXXIX

Ocurre entonces que me pierdo y soy feliz de no encontrarme, de no hallarme entre los folios de esta doble vida, de sólo reconocerme por los giros que hacen tus senos frente al viento, de reconocerme sólo en las palpitaciones quejumbrosas esparcidas por tu cuerpo. Ocurre entonces Sylvia que me he perdido.

XL

Al final sólo queda tu nombre, sólo quedan tu nombre y tu aroma, jadeantes; el enigma de no saber si alguna vez fue posible o si tan sólo eres la vaga impresión del deseo persistiendo irremediablemente en el vértigo de saberte mía y haberte perdido.

2 comentarios:

Silvia_D dijo...

Hola, he encontrado tu blog buscando referencias al Quijote, lo estamos "desmenuzando" en el blog de un amigo, lectura colectiva, quizás te gustaría participar.

Pedro Ojeda, de la Universidad de Burgos, en su blog, "La Acequia", http://laacequia.blogspot.com/

Pienso que tu opinión nos enriquecería a todos.

Saludos

Anónimo dijo...

holaaaaa
soy hija de una de sus alumnas de la UNICA
de tulia
lei la novela y me parecio
hermosa, interesante, llena de un amor demasiado grande
mientras la leia mas me encantaba
es usted un gran escritor
quede encantada
ahora a todo el mundo le cuento de la novela tan bella q lei
me gustaria saber en q se inspirò
porke logro un trabajo fascinante
lo felicito de corazon