miércoles, octubre 29, 2008

Dudas: palabras homófonas.

Entre las tantas dificultades que se nos presentan al momento de escribir, tenemos las referentes al uso de las palabras homófonas: que suenan de igual modo que otras, pero que difieren en el significado, por ejemplo: incipiente o insipiente, rayar o rallar, sierra o cierra.

Veamos los ejemplos con errores:

Es un prominente escritor a pesar de su carrera insipiente. (¿Ignorante?)

Insipiente.

(Del lat. insipĭens, -entis).

1. adj. Falto de sabiduría o ciencia.

2. adj. Falto de juicio.

Incipiente.

(Del lat. incipĭens, -entis).

1. adj. Que empieza.

Debió escribirse:

Es un prominente escritor a pesar de su carrera incipiente.

Veamos otro ejemplo:

Rallaba su poema de amor mientras gimoteaba su tristeza. (¿Desmenuzaba con un rallador su poema?)

Rallar.

(De rallo).

1. tr. Desmenuzar algo restregándolo con el rallador.

Rayar.

(Del lat. radiāre).

1. tr. Hacer o tirar rayas.

2. tr. Tachar lo manuscrito o impreso, con una o varias rayas.

Debió escribirse:

Rayaba su poema de amor mientras gimoteaba su tristeza.

Sigamos:

Antes de irse sierra bien la puerta.

Sierra.

(Del lat. serra).

1. f. Herramienta para cortar madera u otros objetos duros, que generalmente consiste en una hoja de acero dentada sujeta a una empuñadura.

2. f. Lugar donde se sierra.

Cierra tercera persona del singular del presente de indicativo del verbo cerrar.

(Del lat. *serrare, de serāre).

1.-tr. Asegurar con cerradura, pasador, pestillo, tranca u otro instrumento, una puerta, ventana, tapa, etc., para impedir que se abra.

Debió escribirse entonces:

Antes de irse cierra bien la puerta.

La única manera de salir airoso con el uso de las palabras homófonas es dominando los significados y el contexto donde las vamos a ubicar.