viernes, diciembre 15, 2006

LENGUAJE LITERARIO.

El lenguaje literario es, básicamente, la lengua escrita estándar en la que se introducen palabras poco usuales (cultismos, voces inusitadas, extranjerismos, arcaísmos, etc.) y que se somete normalmente a una voluntad de forma. Por una parte, tiene muchos rasgos que lo acercan a la lengua escrita culta; pero por otra, es frecuente que aparezcan en él giros coloquiales y hasta vulgares, para producir ciertos efectos expresivos.
Función poética.
Cuando el lenguaje se utiliza para producir belleza, para llamar la atención sobre sí mismo, actúa en él la función poética. Lo importante no es tanto lo que se dice sino cómo se dice. El escritor pretende suscitar en el receptor una serie de sensaciones de belleza, creatividad e influencia a través de la forma de su mensaje.
Son válidos todos los recursos expresivos. Esta función aparece también en el lenguaje coloquial; cualquier persona, al construir su mensaje, selecciona de manera consciente o inconsciente las palabras, las inflexiones de la voz o los tipos de oraciones para conseguir una transmisión más eficaz de aquello que se pretende comunicar.
PARADOJA.
La paradoja es un recurso literario que expresa ideas contradictorias por naturaleza en un mismo pensamiento, el cual generalmente encierra una verdad profunda. “…al avaro, las riquezas lo hacen más pobre”.
Hipérbole.
Se trata de una exageración, de una afirmación por exceso: Una mujer tan delgada, / que en la vaina de una espada / se trajo a la sepultura. El símil o comparación.
Cuando comparamos, por ejemplo, la vejez con una puesta de sol, en ninguno de los dos términos que intervienen en la comparación se produce mutación de significado. El símil consiste en relacionar un término real con otro imaginario con el que guarda una semejanza, los elementos más utilizados son Cual, Como... La comparación es frecuente también fuera de la lengua literaria. Se recurre a ella para presentar más plásticamente lo que se quiere decir y, muchas veces, para concretar un pensamiento abstracto.
La metáfora.
Es el tropo por el cual se aplica el nombre de un objeto a otro objeto con el cual se observa alguna analogía, suprimiendo cualquier rastro gramatical de comparación, existe una transferencia de significados: cabellos de oro.
Hay metáforas que están incorporadas al uso general, los diccionarios las registran y nadie las identifica como figuras, ya que no producen extrañeza alguna (la cabeza de un alfiler). Pero el escritor crea sus propias metáforas (Mi soledad llevo dentro, torre de ciegas ventanas). Una palabra aislada no puede funcionar como metáfora, necesita de un contexto en el que cobrar significado.
Personificación en el lenguaje literario: Es la atribución de cualidades humanas a los animales y a las cosas: el viento susurra una canción monótona. Murmuran las fuentes, lloran los cielos.
Antítesis: Una palabra se pone en relación, más o menos sorprendente, con otra contraria: Era sólo sombra de su pasado esplendor.

No hay comentarios.: