miércoles, abril 04, 2007

EL OXÍMORON - ¿NEO FOLKLORE?

Música Callada, es el título del artículo que nos brinda Edmundo Bracho en la página 19, críticas y escenas en El Nacional del día; 01/04/07. Versa dicho escrito sobre el Neo-Folklore, esa mezcla musical que escuchamos a diario en la radio y de la cual sólo sabemos que surge de añadirle ritmos nuevos y tecno electrónica a temas musicales venezolanos, criollísimos, que en su momento fueron muy exitosos y en la actualidad son maquillados para difundirlos bajo la venia de la Ley Resorte.
"El oxímoron aquí bypasea al mismo rigor de la ley. Porque de tradicional venezolano nada tiene el minimal techno o la indietrónica. Quizá el neo - folklore nos esté comentando nuestra incapacidad como cultura de masas de concentrarnos en nuestro propio presente, y el puqui-pá sea el mejor fondo sonoro para nuestra desmemoriada indolencia"
Entrando en materia de lenguaje; sobre el oxímoron como recurso estilístico semántico tenemos:
Del griego oxymoron, figura retórica que une en un solo sintagma dos palabras de significado opuesto:
Que tiernamente hieres (San Juan de la Cruz).
La música callada (San Juan de la Cruz).
Sosiega un poco, airado temeroso
humilde vencedor, niño gigante
cobarde matador, firme inconstante
traidor leal, rendido vitorioso.
Déjame en paz, pacífico furioso,
villano hidalgo, tímido arrogante,
cuerdo loco, filósofo ignorante,
ciego lince, seguro cauteloso… Lope de Vega, Rimas.
Entiendo lo que me basta
y solamente no entiendo
cómo se sufre a sí mismo
un ignorante soberbio... Lope de Vega.
Es hielo abrasador, es fuego helado. F. de Quevedo.
Lo fugitivo permanece y dura. F. de Quevedo.
Y mientras con gentil descortesía
mueve el viento la hebra voladora… Luis de Góngora.
Los gnósticos hablaron de una luz oscura. J.L. Borges.
Mis libros están llenos de vacíos. A. Monterroso.

Todo iba como una seda para aquella feroz hormiga,
cuando de súbito le afligió el cielo con tremenda desgracia… B. Pérez Galdós, Torquemada en la hoguera.
Jorge Luis Borges escribía cuentos en los que la estructura misma y el estilo era un puro oxímoron, traspuesto incluso en los títulos: Historia de la eternidad, El milagro secreto, El impostor inverosímil Tom Castro, El Incivil Maestro de Ceremonias Kotsuké no Suké, El Asesino Desinteresado Bill Harrigan, El Atroz Redentor Lazarus Morell…
Existen también formas del oxímoron que se relacionan con el contexto pragmático de la lengua y con el teatro de forma que se crea el efecto estilístico de la ironía. Esto ocurriría cuando un término suave o cortés se contrapone a una acción violenta de naturaleza extralingüística, como señala Fernando Sorrentino en “El oxímoron en acción”, Literalia, núm. 8 (2003).
Para finalizar les ofrezco los ejemplos que adornan el artículo sobre el Neo- Folklore de Edmundo Bracho:
Está el rabipelao primoroso. O el dinosaurio moderno. O el desierto lluvioso, el fuego helado y la luz oscura. Cada uno es un oxímoron... Ya muchos quisiéramos que no se utilizara el recurso del oxímoron para elaborar "golpes democráticos" o "pluralidad unipartidista".

2 comentarios:

enigmas PRESS / Gandica dijo...

A mí me gusta uno que resulta del hecho, que mientras más conozco a Dios me vuelvo más ateo.

Post ilustrativo el suyo.

Nilda J. Sarmiento J. dijo...

SALUDOS,
GRACIAS POR EL APORTE.
SEGUIMOS LEYÉNDONOS.
UN ABRAZO.